Iba a escribir un poco sobre la reciente visita del Circo del Sol a Granada. Tuve la oportunidad de ir a verlo, y no ha sido la primera vez, y como todas las veces he salido impresionada. Es tal la armonía y la perfección con la que ejecutan todos los ejercicios, que es un verdadero deleite para todos sentidos, y sale una con "alegría" tal y como se llama el ultimo espectáculo que han traído a esta nuestra querida Granada, que de vez en cuando, y más veces de lo yo quisiera no deja de sorprenderme, y no con alegría precisamente.
Digo esto porque esta mañana, cuando he leído en el periódico que han mutilado la estatua de Lorca que hay en el paseo de la Constitución, me he puesto de mal humor. Parece mentira que haya personas tan vandálicas, que no sepan respetar lo que es patrimonio de todos, como sí las cosas no costaran dinero ponerlas y mantenerlas.
A veces siento verguenza ajena porque me consta que, aunque en todos lados se cuecen habas, hay otras capitales, que no tengo por qué nombrar, los ciudadanos, no todos como es natural, son mas respetuosos con el mobiliario de sus calles y plazas. Todo lo contrario de lo que sucede aquí.
En fin no me voy ha irritar más, porque a fin de cuentas son solos unos pocos los indeseables que no respetan nada, pero a fin de cuentas pagamos justos por pecadores.
