Invierno
Cuajado está de nieve mi tejado
que otro mortal el mundo ha abandonado.
Sentado estoy, tapado hasta los ojos,
observando las ascuas de la lumbre,
mientras a mis espaldas, destemplado,
el aire agita puertas y cerrojos.
Solo estoy ya, aunque no me acostumbre.
Solo sin ti, y mi corazón helado.
y el carámbano anida en mi ventana.
El frío viento azota, esta mañana,
mi fachada, furioso y despiadado.
Solo estoy a la cumbre acurrucado,
que con su doble anuncia, ya cercana,
Sentado estoy, tapado hasta los ojos,
observando las ascuas de la lumbre,
mientras a mis espaldas, destemplado,
el aire agita puertas y cerrojos.
Solo estoy ya, aunque no me acostumbre.
Solo sin ti, y mi corazón helado.
Juan Jose.